Si estas planteándote emprender con un ecommerce o, si por el contrario, ya tienes tu negocio pero quieres llevarlo al siguiente nivel y empezar a vender por Internet, este nuevo canal te proporcionará múltiples ventajas (algunas de ellas las encontrarás en post anteriores). Para ello es importante tener ciertos factores en cuenta, por eso, en este post te damos algunos consejos básicos para que pongas en marcha tu web:

Partimos de una idea: lo principal tanto en tu negocio online como en el físico es que el cliente confíe en ti y, sobre todo, en tu producto, ya que solo así realizará la compra. Además, debemos intentar que la experiencia de compra sea lo más satisfactoria posible para que se repita en futuras ocasiones.

1. Pon toda la información posible al alcance del cliente

Facilitando en todo momento los datos de tu empresa: teléfono, email,… en definitiva, toda la información que se pueda dar, para que el cliente sepa que si surge algún inconveniente tiene donde dirigirse. Esto siempre aporta mayor seguridad y confianza.

2. Genera confianza:

Es importante que en la página web aparezca todo lo relacionado con el cliente, desde la política de protección de datos hasta el proceso de devoluciones bien detallado, para que tengan claros cuáles son sus derechos y sepan que pueden ejercerlos en cualquier momento.

3. Ten claro cual es tu público objetivo y céntrate en él:

Tienes que tener claro a quién te diriges, quién va a consumir tus productos y cómo te tienes que comunicar con este público objetivo. Las acciones de marketing que tomes tienen que tener en cuenta la edad, el género, el estilo de vida, … de tus consumidores. Debes adaptarte al tipo de cliente al que te quieres dirigir,  ya que, por ejemplo, no es lo mismo enfocarte a consumidores finales que a otras empresas.

4. Facilidad de uso de la página:

Cuanto más intuitiva sea, mejor. La página de inicio es fundamental, es el eje de tu tienda y lo primero que ven tus clientes potenciales al entrar en tu página, por lo que facilitarle al usuario el acceso a otras secciones es fundamental. Además, también influye un diseño gráfico atractivo, hay que tener en cuenta que el uso de ciertos diseños puede ser contraproducente, piensa que no todos tus clientes tienen un monitor de alta resolución, ni la misma claridad de visión o facilidad para la lectura, por eso tienes que evitar utilizar ciertos colores y ciertas tipografías de letras.

5. Información detallada del producto:

Ha de ser lo mas clara, precisa y detallada posible. Ten en cuenta que el cliente no puede ver el producto, lo cual es un gran inconveniente a la hora de realizar una compra, por lo que tenemos que compensar esa carencia dando toda la información posible de nuestro producto y de los servicios adicionales. Y es que, aunque el precio es un factor de compra muy importante, no siempre compramos en el sitio más barato, si no en el que más prestaciones y confianza nos ofrece.

6. Compra fácil y rápida:

Como ya hemos comentado, toda la página ha de ser fácil e intuitiva pero hacemos especial incapié en que el proceso de compra sea intuitivo, fácil y rápido. Si la página tarda en cargar, sobre todo en el momento del pago, puede generar desconfianza en el cliente o dudas sobre si el producto se ha llegado a comprar. Por otro lado si el proceso de compra es largo o enrevesado, pueden decidir comprar en otro sitio.

7. Mantén informados a tus clientes:

Por lo general (aunque depende del tipo de negocio), es más difícil conseguir un nuevo cliente que volver a vender a un cliente satisfecho. Cuando consigas un cliente asegúrate de que queda satisfecho con su compra y mantenlo informado de las promociones, nuevos productos, ofertas,… Además de la página web, el marketing online (envío de correos masivos, anuncios por redes sociales,…) puede serte de gran ayuda.

 

Desde Export@ Digital tratamos de fomentar la exportación digital de nuestras empresas y pensamos que las tiendas online pueden ser un buen canal para ello, así que aprovecha este medio y ¡aumenta tus ventas!.